Por Judith Vives
Ilustración de Blanca Garaluce

kings-of-leon-wallsA veces pienso en lo difícil que debe de ser sacar un nuevo LP una vez estás establecido en el panorama musical en una posición relativamente alta. No me malinterpretéis, producir nuevo material discográfico es siempre difícil y es la máxima expresión de vulnerabilidad. Aquí está un álbum en el que he trabajado meses, en el que puedes leer todo lo que he vivido, y lo estoy lanzando a las fieras (medios, críticos, fans y haters por igual) para que hagan con él lo que les venga en gana. Pero una vez estás establecido y ya has dado que hablar en el pasado, siento que los grupos se enfrentan a una presión añadida: la de las temidas comparaciones. Nunca llueve a gusto de todos, eso queda claro, pero el forcejeo que puede sufrir un grupo entre los defensores del cambio y aquellos que se aferran al concepto de grupo que les enamoró en un primer lugar puede llegar a ser muy duro.

Por ello, no me sorprende que Kings of Leon se hayan tomado tres años para regresar a las estanterías de vuestra tienda de música más cercana, y es que su próximo paso (musical) debía ser meditado. El 14 de octubre finalmente se lanzaban al vacío y a las hienas de la crítica y lanzaban su séptimo álbum de estudio, WALLS.

Aunque la canción final del trabajo sí hable de paredes que se derrumban, el título de lo nuevo de Kings of Leon es en realidad un acrónimo para ‘We Are Like Love Songs’. Bonito, ¿verdad? WALLS nos presenta diez canciones y tuvo como carta de presentación ‘Waste a Moment’.

El disco, lo mires por donde lo mires, sabe a poco. En esto pueden coincidir tanto los fans declarados de la banda, a los que no les es suficiente con diez meras canciones después de haber estado esperando tres años como también aquellos más escépticos del paso atrás respecto al rock que ha tomado la banda. Y es que lo nuevo de Kings of Leon es fresco y una reinterpretación de su sonido más clásico, pero con elementos más afines a las preferencias de las radios principales.

El productor del trabajo, Markus Dravs, habiendo trabajado anteriormente con Coldplay y Mumford and Sons, habrá tenido algo que ver en el ligero giro hacia lo mainstream (odio esa palabra, de verdad, pero en este caso está justificado su uso) en términos del rock que despunta en las listas de éxito.

Debates a parte, creo que nos encontramos ante un buen trabajo que tiene verdaderas joyas. Personalmente, me quedo con ‘Reverend’ (es una de estas canciones de rock simplemente buenas, que te trasladan a verano y a ir en coche con las ventanas bajadas) y ‘Eyes on You’. Además, como fan de Imagine Dragons me llamó mucho la atención ‘Around the World’, ya que parece una canción que funcionaría perfectamente en Night Visions, el primer trabajo de la banda. Otra de las canciones de WALLS muestra una posible dirección que podría tomar la banda en sus futuros proyectos, y es en mi opinión un riesgo que ha dado fruto. Estoy hablando de ‘Muchacho’, una canción nostálgica que parece trasladarnos a la puerta de un Saloon del antiguo Oeste.

Aunque la voz de Caleb Followill es, como siempre, sublime, no acaban de convencer ‘Over’ (que cae un poco en lo plano y ni siquiera puede salvarse el contenido al tener una letra que no arriesga) o ‘Conversation Piece’ (un poco por el mismo motivo, le falta un elemento sorpresa aunque la letra de esta sí convence un poco más).

Si hay algo que queda claro de Kings of Leon es que al ser un grupo que se gana la vida con directos sabe perfectamente qué fórmulas funcionan frente a públicos de todo tipo. El fan que lleva orgulloso merch de la banda, el padre que acompaña a su hijo al concierto, alguien que simplemente pasaba por ese escenario del festival en el momento adecuado y decide quedarse a verles un rato. ¿Qué tienen todos en común? El hecho de que todos van a poder corear el estribillo en nada y sentirse parte de la canción que estén tocando, sea cual sea. Kings of Leon saben la fórmula de una buena canción que va a tener buena aceptación tanto mediática como en sus directos. ¿Será su único objetivo conseguir un nuevo hit como ‘Sex On Fire’ o ‘Use Somebody’ y esto de sacar un cd para acompañar a ‘Waste A Moment’ es una distracción? Eso lo dejamos a la imaginación conspiratoria de cada uno.

Lo que queda claro es que Kings of Leon han vuelto después de su letargo para quedarse, y han presentado un trabajo con un sonido cuidado y los riesgos justos, asegurándose ser una presencia recurrente en los festivales más prestigiosos un año más.

https://open.spotify.com/album/08ibdX8K0GETv20UEku3sm