Nota al lector: Oceaund no se hace responsable de mi amor por Lena Dunham.

La actriz, directora, escritora y guionista (suponemos que también fabricadora de su propio papel para los guiones) ha despertado por partes iguales amor y odio desde el estreno de Girls en HBO. En mí, tras cuatro temporadas, mucho amor. Capítulo tras capítulo, Lena Dunham ha conseguido desmontar años de series rancias mal llamadas «para chicas». Ni reflexiones melodramáticas de voz en off, ni sexualización de las protagonistas, ni taconazos. Los personajes son tan pringados y tan pringadas como tú y como yo. Hay quien incluso se ofende por no sentirse identificado con ellas o ellos; al parecer hay más gente mundana viviendo en el Upper East Side de la que podía imaginar.

Dunham derrocha estilo propio tanto para enseñar las tetas como para elegir la banda sonora a sus capítulos. En Say my name (4×07), Hannah camina de noche al ritmo de Chet Baker en ‘I get along without you very well (except sometimes)’. No es que la canción sea precisamente desconocida, pero no deja de ser una agradable sorpresa escuchar jazz en productos televisivos comerciales (o comercializados).

A la canción en cuestión, compuesta por Hoagy Carmichael en 1939 a partir de un poema de Jane Brown Thompson, le han puesto voz artistas tan incuestionables –incluyendo al propio Chet Baker– que ha entrado en ese pequeño reducto en el que la versión supera o al menos iguala a la original. En este caso, voy a dejar aparte las de la talla de Nina Simone o Billie Holiday (juzguen ustedes mismos) para centrarme en una más contemporánea y no tan conocida: Silvia Pérez Cruz.

Aunque las versiones sean algo tan generalmente detestado, Silvia Pérez ha demostrado en toda su trayectoria el talento que tiene para interpretar canciones del imaginario popular –ejemplo de ello es el disco grabado junto a Javier Colina, En la imaginación, así como sus múltiples colaboraciones–. En granada, junto a Raül Fernández, da una nueva dimensión a esta habilidad impregnando de una fuerte personalidad cada una de las piezas que lo componen. Su voz y arreglos dan una forma completamente nueva a canciones como ‘Compañero (Elegía a Ramón Sijé)’, ‘Que me van aniquiliando’ o ‘Pequeño Vals Vienés’, esta última de una belleza casi hipnótica.

En la edición especial del disco, que añade cuatro canciones y las re-versiones en acústico de ‘Carabelas nada’ y la ya mencionada, ‘Pequeño Vals Vienés’, destaca la incorporación del himno sobre la guerra civil compuesto por Chicho Sánchez Ferlosio, ‘Gallo negro, Gallo rojo’.

A sus 32 años y con una amplia trayectoria discográfica a sus espaldas, Silvia ha participado también en proyectos tan interesantes como Las Migascuarteto femenino de flamenco en el que colaboró hasta 2011– o Cerca de tu casa, película aun sin fecha de estreno que protagoniza y a la que pone banda sonora. Con granada, su último disco, la autora se ha afianzado como una de las mejores y más versátiles voces del panorama nacional. Las entradas para su cita en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Madrid los días 9 y 10 de abril, englobada en el ciclo de conciertos entre cuerdas que está realizando en múltiples ciudades europeas, se encuentran agotadas desde hace meses.